Publicado: 30/01/2007
Rio Negro

RIO NEGRO: LA AIC DICE QUE LAS HIDROELECTRICAS NO LA OYEN (30/01)(Rio Negro)

NEUQUEN (AN) - La conducción de la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas (AIC) advirtió que si las hidroeléctricas y la secretaría de Energía de la Nación hubieran atendido sus advertencias, el nivel del río Negro no sería ahora tan alto. Justo cuando es preciso bajar el nivel de la napa en las chacras del Alto Valle, las erogaciones desde las presas compensadoras creció hasta un 50%.


Lo que la AIC sostiene es que si, en vez de almacenar el agua en los lagos durante la primavera, las presas la hubieran dejado pasar hacia los valles, hoy la situación en los embalses sería más aliviada. El organismo sostuvo que esa fue la indicación que emitió oportunamente.

Pero hace años que la cuenca del Negro está al servicio de la generación hidroeléctrica más que al de la regulación de los caudales que llegan a los valles.

En medio de una crisis energética que el gobierno nacional se obstina en disimular, los aportes de las hidroeléctricas del norte de la Patagonia son vitales para cubrir la demanda.

Lo que hacen los concesionarios de las presas está dentro de la ley, que se creó para privatizar las centrales pero jamás fue revisada. Esa norma no atiende períodos excepcionales de sequías, de crecidas o de -como ahora- crisis energética.

Por ello, hace tiempo que la AIC hace las veces de espectador de lujo en cuestiones de manejo de caudales cuando las hidroeléctricas se mantienen dentro de los parámetros de esas normas de manejo del agua.

El primer día de este año, cuando comenzaban a regir las limitaciones en las erogaciones de agua para proteger la producción frutícola en el valle, los niveles combinados de los ríos Limay y Neuquén le daban al Negro un caudal de 830 metros cúbicos por segundo.

Lo llamativo es que casi un mes más tarde, el río Negro, lejos de mantenerse en niveles razonables para permitir el drenaje del agua de riego, tiene ahora un caudal un 50% superior al de principios de enero.

 

Estaba escrito

 

En un documento oficial, el informe hidrometeorológico mensual, la AIC sostuvo que "una operación con mayores erogaciones en los meses previos, particularmente en octubre y noviembre, pudo haber minimizado la diferencia con los valores preceptuados por las normas".

El organismo recordó que ello había sido oportunamente indicado.

Año a año, el manejo de los ríos de la zona atraviesa sucesivos círculos viciosos: se sabe que habrá mayores aportes pero no se toman previsiones, entonces los embalses entran en la denominada "franja de atenuación de crecidas" y se aplican los procedimientos de la excepción, consistentes subir las erogaciones hasta que los niveles de los lagos llegan a la normalidad.

De hecho, es lo que está pasando con el embalse Los Barreales, del sistema Cerros Colorados, donde el agua tiene 40 centímetros más de altura que el máximo correspondiente a la época del año. Hasta que ese nivel no descienda, la cantidad de agua liberada por el dique compensador seguirá siendo alta.

Al embalse del El Chocón le falta aún un metro para llegar a ese nivel, pero de todos modos es evidente que no precisa apelar a la excepcionalidad para que el río Limay llegue a la ciudad de Neuquén con un caudal de 600 metros cúbicos por segundo.